Hoy desde la casita donde vivieron nuestros amados padres
Jesús, María y José, queremos seguir conociendo, creciendo y viviendo junto a
los tres de Nazaret y así como ellos lo hicieron, invitando a que
llevemos la esperanza al mundo. Nos preguntaban cómo llevar la esperanza al
mundo y desde SAFANA les decimos como en 33 años seguimos llevando la
esperanza, la esperanza que abrió las puertas de la santidad a José Manyanet,
la esperanza que se llenó de confianza en Madre Encarnación Colomina, la
esperanza que abrió las puertas de América a Madre Cecilia Cros, la esperanza que
en Madre Edith encontró acogida para fundar SAFANA, la esperanza que las Hijas
de la Sagrada Familia de Nazaret, abren día tras día en cada rincón donde está
Nazaret y que se hace presente en cada SAFANA, desde los chispitas, los rayitos
de luz, los antorchas de esperanza, en el joven de camino de juventud y
en el SAFANA X Siempre. Llevamos la esperanza al mundo desde nuestro
compromiso social que ayuda a realizar nuestra vocación cristiana: apoyando
desde el conocimiento al que le cuesta, viviendo gestos de solidaridad con el
más necesitado, propagando el movimiento fuera del colegio en especial la
experiencia con los niños del centro de capacitación Jesús de Nazaret en el
Barrio "La Chinita", entregando detalles llenos de sonrisa y sueños
desde el ahorro, catequesis, en la visita a los ancianos y enfermos, en el
trabajo por la propia familia.
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